Vengo del futuro cercano, a las 7 AM veo en la calle muchas personas saliendo al trabajo o al estudio en unas bicicletas eléctricas cómodas y eficientes que tienen todas el mismo diseño, todas estas personas empezaron a ahorrarse un montón de dinero en gasolina, parqueaderos e impuestos y solo utilizan parte de lo que se ahorran en pagar en la factura de servicios públicos una cómoda cuota por la compra de su bicicleta eléctrica a Empresas Públicas de Medellín.
Sé que muchas personas personas aún se niegan a creer la verdadera magnitud de la grave crisis ambiental que vive la ciudad, por eso quiero hacerles esta comparación: Seguro a alguno de ustedes les ha pasado que desde hace años sienten cierta dolencia progresiva en el cuerpo pero no le dieron importancia (a mi me pasó), hasta que llegó un momento en que el dolor fue insoportable y tuvieron que ir a urgencias, después en la cita con el médico se dieron cuenta que tenían una grave dolencia o enfermedad.
Eso fue lo que le ha pasado a nuestra ciudad con la crisis del aire, hace muchos años sentíamos los síntomas, pero sistemáticamente casi todo el mundo lo negaba y no le dieron importancia hasta que en este último mes el problema fue tan grave que tuvimos que implementar medidas de emergencia, por eso a pesar de que afortunadamente parece ser que el fenómeno del niño nos va a dar literalmente un pequeño respiro no podemos volver a ignorar o minimizar este problema, como en el caso de una enfermedad debemos empezar a aplicar diferentes tratamientos para mejorarnos.
Muchas cosas se deben empezar a hacer en la ciudad, por eso debemos de pasar del debate a las propuestas concretas y por eso quiero plantear la necesidad de que EPM inicie tan pronto como sea posible un proyecto para distribuir bicicletas eléctricas entre todos los habitantes del Valle de Aburrá, las razones por las cuales un proyecto así puede causar un gran impacto en las raíces del problema que vivimos son las siguientes:
- Reduce el tráfico de motos: Por muchas razones el exagerado crecimiento de las motos en la ciudad es insostenible, por eso es necesario ofrecerles a las personas de todos los estratos una alternativa de transporte mucho más económica y menos peligrosa que en vez de contaminar tanto utilice la energía limpia que produce EPM.
- Optimiza las vías: Está claro que físicamente la ciudad no puede tener el crecimiento en vías que demanda el crecimiento exagerado de las ventas de motos y carros, si se hacen ciclofranjas en las principales avenidas se podría así generar más flujo de tráfico sin ampliar avenidas ni quitarle el poco espacio que le queda al peatón, además para masificar el uso de la bicicleta en el Valle de Aburrá en todas las vías del mismo las bicicletas eléctricas o de pedaleo asistido sean utilizadas, por las condiciones geográficas de la ciudad.
- Contribuye a la salud pública: No solo tendremos menos motos contaminando el aire sino que la gente se vería incentivada a realizar permanentemente una actividad física como montar en bicicleta, muchos estudios demuestran que quienes usamos la bicicleta a diario somos menos propensos a sufrir todo tipo de enfermedades, ahora vuelvo y repito, que para que este beneficio sea masivo las bicicletas eléctricas se hacen necesarias, ya que no todo el mundo está en condiciones de subir las lomas en bicicleta y la asistencia que este tipo de bicicletas proporcionan permitirían que hagan un ejercicio acorde a sus capacidades diariamente mientras se movilizan en la ciudad.
EPM es el principal patrimonio de la ciudad, por esa razón es necesario que se involucre mucho más en la solución de este grave problema que vivimos, sobre todo porque existen antecedentes recientes con el proyecto de la masificación del gas, en esa época EPM importó y financió los gasodomésticos que permitieron a la población optimizar el uso de la energía y tener mayor calidad de vida, me pregunto qué hubiéramos hecho en esta crisis energética sin los gasodomésticos, por eso se hace necesaria una solución como las bicicletas eléctricas para esta crisis ambiental.
Ahora es claro que un proyecto de estos no se hace de la noche a la mañana y hay muchos aspectos en los que hay que trabajar para que sea viable, por ejemplo es necesario que el gobierno nacional reduzca o levante los aranceles a la importación de bicicletas eléctricas de la mano de políticas de incentivo fiscal para las empresas nacionales que las producen, también la secretaría de movilidad debe comprometerse al fín a delimitar las ciclofranjas que se necesitan en toda la ciudad y a continuar colocando resaltos en los carriles de bajada de las vías de mayor pendiente, entre otros aspectos.
Pero como ciudadanos de Medellín sabemos que tanto EPM como la ciudad pueden llevar este proyecto a cabo, los recursos económicos están, la capacidad de realizarlo está, se necesita es el compromiso de la administración municipal con el tema, llegó la hora en que los recursos e instituciones del municipio dejen de enfocarse tanto en facilitar los negocios de las grandes multinacionales y mejor llevar a cabo un proyecto ambicioso de verdadera innovación social y ambiental en la ciudad, dejemos de pensar tanto en los negocios a largo plazo y pensemos más en nuestra salud.
Comentar