La verdad sobre la “impunidad judicial” en Colombia

“si una persona comete un delito, no deja de ser persona, tienes derechos fundamentales y procesales en el ámbito penal”

Hablar de justicia es un asunto bastante delicado o quizás molesto para gran parte de la ciudadanía, pues se tiene un mal concepto o una mala experiencia en cuanto a ello. Ulpiano, un jurisconsulto Romano definió la justicia con tres grandes premisas; no hacer daño a nadie, vivir honestamente y dar a cada quien lo que le pertenece, eso es básicamente la justicia. Pero como ninguna sociedad es perfecta y hay conflictos permanentemente, es el estado quien debe intervenir y a través de su aparato judicial poner mano firme cuando el orden social se vea quebrantado.

Eso es claro, el problema entonces es; si ese aparato judicial es o no eficiente, si los servidores e impartidores de justicia son o no eficaces en el momento de tomar las decisiones que dejen por ejemplo en libertad a un presunto delincuente.

Nuestro sistema penal es conocido como un sistema excesivamente garantista, por esta razón quien ejerce funciones judiciales o quién sea la parte acusadora debe ser una persona altamente preparada y calificada para que la impunidad judicial no sea un hecho diario, producto de una mala praxis profesional o producto de un mal procedimiento.

Lo que se debe entender es que si una persona comete un delito, no deja de ser persona, tiene derechos fundamentales y procesales en el ámbito penal, y la razón por la cual se deja en libertad a muchos “delincuentes” es por hacer mal el procedimiento pertinente, los jueces no son los malos, los jueces solo aplican la norma, y si la captura por ejemplo es ilegal pues sencillamente se deja en libertad a quien presuntamente cometió el ilícito. Se ha visto que hay funcionarios de la Policía que no saben ni cuáles son los derechos de un capturado. Si no sabes cuales son sus derechos y al momento de privarlo de su libertad no se los haces saber o no se los lees, la captura es ilegal y lo que debe hacer el juez de control de garantías es declarar la ilegalidad de la captura y dejar a la persona en libertad.