«A comprar las alpargatas porque lo que viene es joropo» Luis Herrera Campins
Una noticia que tiene a muchos venezolanos preocupados con el anuncio de Maduro informando con el registro biométrico para censar a las personas atendidas por la Misión Alimentación se iniciará el 1 de abril del 2015, en donde la revolución creará una plataforma digitalizada en materia de venta de alimentos en supermercados público y privado. Siempre esperando lo mejor del Gobierno de Maduro, en pro de una mejor calidad de vida para su pueblo. Racionamiento o no es una manera de controlar a un pueblo que está acostumbrado al desorden y al despilfarro de alimentos. También será una manera de evitar el acaparamiento, cuando otras personas también están en las mismas necesidades de obtener los alimentos necesarios para su consumo diario, pero esta no es la vía que nos quiere imponer el régimen en condicionar la compra de alimentos mediante un sistema de control, es lo más humillante para un país, es un derecho humano tener alimentación educación, salud y libertad. Hago unas interrogantes ¿Qué pasará con las personas que no se registren y quieran comprar? ¿Se les negará su alimentación por parte del gobierno? ¿Qué pasa si no quiero registrarme? ¿Es obligatorio? ¿Si paso por un PEDVAL o MERCAL no puedo entrar a comprar si quiero? ¿Cuando hagan jornadas de venta a cielo abierto pedirán el registro? Porque nuestra carta Magna nos dice en su artículo 117 «Todas las personas tendrán derecho a disponer de bienes y servicios de calidad, así como a una información adecuada y no engañosa sobre el contenido y características de los productos y servicios que consumen; a la libertad de elección y a un trato equitativo y digno. La ley establecerá los mecanismos necesarios para garantizar esos derechos, las normas de control de calidad y cantidad de bienes y servicios, los procedimientos de defensa del público consumidor, el resarcimiento de los daños ocasionados y las sanciones correspondientes por la violación de estos derechos.» No entiendo como este gobierno ahora nos imponer unas capta huellas para comprar comida; además, es la prueba de que la escasez es inducida por el gobierno para ejercer control social. Hasta podemos decir con el conocimiento derecho es inconstitucional negarle al consumidor la venta de un bien cualquiera por haberlo comprado una misma cantidad de bienes que otro sin conocer su realidad específica, pero no sé qué puede pensar esto el TSJ sobre lo mencionado.
Tan Bello nuestro país con tantos recursos energéticos, minerales, tierras productivas fértiles, nieves eternas, selvas, desierto, hermosas playas, un clima fabuloso, pero lamentablemente no hemos logrado tener dirigentes que sepan aprovechar todos estos recursos en beneficio del país y sus ciudadanos, como consecuencia de todos estos desatinos económicos llega el comandante Chávez prometiendo cambios estructurales drásticos, pero profundizando los vicios existentes creando muchos más de lo que existía en la cuarta república que lo impuso en la quinta que él mismo creo. Se nos muere y nos deja Nicolás Maduro sin ningún tipo de liderazgo ni formación intelectual, manejando los destinos de este país, llevándonos como país y sociedad a una dependencia e improductividad nunca vista. Lo que podemos decir vivimos en un martirio con la escasez, producción nacional e importación está llegando a niveles crítico, el gobierno obligatoriamente tiene la necesidad de racionar los alimentos a través de sus redes de distribución de alimentos. Las importaciones ya son insuficientes y el estado no puede soportar un ritmo tan frenético, sustituir gran parte de la producción nacional de alimentos con importaciones, no beneficia ni al estado, ni al gobierno, ni al pueblo ni a los sectores públicos y privados. Vivimos escases e inflación a causa de sustituir la producción nacional por importaciones. Unos de los voceros de Francisco Martínez, vicepresidente Fedecámaras, hizo críticas fuertes al sistema biométrico. «Es un control y un reparto de la escasez dentro de un modelo equivocado» hasta podemos hacer memoria hace 20 años atrás, cuando el Bolívar, que no era este que hoy han mal llamado «fuerte», nos daba lujo en ir a la tierra de los ancestros de Maduro en Cúcuta entre 15 y 20 pesos por Bolívar. Íbamos a comprar en Colombia mercado libremente y lo traíamos para Venezuela. Era en ese entonces lo que hoy han inventado con un nombre muy particular «contrabando de extracción» solo que en ese entonces quienes extraíamos de Colombia. Éramos nosotros, por una simple razón, nuestra moneda realmente era fuerte. Traíamos de todo por montones, hasta ropa para vestir en cada mercado. Ahora 20 años después se han invertido los papeles, la moneda fuerte es el peso y nuestro irónico Bolívar «fuerte» ha quedado reducido a un cambio de 0.027 pesos por 1 bs, que irrisorio verdad…
Ahora somos nosotros quienes vamos a financiar el despelote del siglo XXI, la revolución bonita para los chavistas enchufados que se robaron y malgastaron los recursos de todos los venezolanos. ¿Será que los recursos a Cuba y otros países aprovechadores también les van a racionar las dádivas para que aprendan a administrarse y nos dejen vivir en paz? ¿Será que el regente y sus séquitos también van a someterse de motu proprio a este racionamiento? De todas estas imposiciones que vienen de esta revolución biométrica…
[author] [author_image timthumb=’on’]https://pbs.twimg.com/profile_images/435723947/robert_tsuster_2_400x400.jpg[/author_image] [author_info]Robert Alvarado Abogado, Columnista en la web. @robertveraz [/author_info] [/author]
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