¿Quién es Antonio Sanguino?
-Soy un ciudadano del común, como cualquier otro. No soy hijo de políticos, ni de personas influyentes. Mis padres son campesinos de la provincia de Ocaña, no obstante, fui criado en la costa caribe colombiana. Desde temprana edad me vinculé a la lucha estudiantil y soy Sociólogo por mi vocación social. Hice parte del movimiento estudiantil por la constituyente de Colombia, también me vinculé al movimiento ciudadano por la paz dirigido por la corporación nuevo arcoíris. Luego me presente al Concejo de Bogotá por el Polo Democrático, y posteriormente por la Alianza Verde. Fui concejal de Bogotá, donde también ejercí como presidente vocero nacional del partido Alianza Verde.
¿En qué consistirá su actividad legislativa en el Senado?
– Tengo tres compromisos. El primero es por el buen vivir y la justicia climática de los colombianos, promoviendo mínimos vitales como el agua para estratos uno, dos y tres. La idea es convertir el agua en un derecho fundamental para generar desarrollo sostenible dentro de todo el territorio nacional. El segundo es por la educación superior, donde pretendemos mejorar la cobertura de la educación, la cual es actualmente del 49% a nivel nacional. El objetivo es que ese porcentaje restante de jóvenes que sale del bachillerato y se quedan por fuera de la educación pueda acceder a la educación superior con calidad. El tercero, es reformar la ley 100 para introducirle mejoras a los regímenes del sistema de salud. Además, trabajaremos para luchar contra la corrupción, ya que ésta puede colapsar nuestros cimientos democráticos. Ya hemos visto como han colapsado algunos departamentos como Guajira y Córdoba, pues no podemos permitir que ello se extienda por todo el territorio nacional. Hay que combatir dicho flagelo con determinación que produce crisis institucionales. También, estoy comprometido con la construcción de la paz, pues toda la vida he sido un abanderado de la misma. Considero prioritario construir un gran pacto nacional por la reconciliación y trabajaremos para ello.
¿Qué obras importantes ha hecho usted por Colombia?
-Presenté 37 proyectos de acuerdo en el Concejo de Bogotá, de los cuales 11 son acuerdos de ciudad, entre los más importantes, la creación de un centro especial de atención de víctimas de graves violaciones a derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. Y este es un acuerdo que no tiene replica en ningún contexto o territorio, ciudad o municipio. Se aprobó este acuerdo, incluso antes de la ley de víctimas, ya que el mismo es, del año 2010 y la ley de víctimas se expidió en el año 2011. Soy autor de un acuerdo que obliga a que el distrito instale dispositivos sonoros para población en condición de discapacidad en todas las interceptaciones semafóricas de Bogotá. También, soy autor de un acuerdo que obliga al distrito a respetar las zonas verdes, evitando deforestaciones y maltrato al medio ambiente. También soy autor de un proyecto que obliga a la Eco-conducción, para evitar emisiones de gases que afecten el medio ambiente por parte de los vehículos automotores. Participé activamente en el ejercicio de control político en el Concejo de Bogotá sobre temas referidos al bienestar de la ciudad, defensa forestal de la ciudad, irregularidades en el plan de alimentación escolar, y hechos de corrupción que rodearon la contratación pública.
¿Cuál es la reforma que propondría con mayor urgencia en el Senado?
-Son muchas, pero la más urgente es la salud y la educación. Proponemos en materia de educación analizar el programa ‘Ser Pilo Paga’, para introducirle mejoras, ya que es excluyente frente a otros jóvenes que no cuenta con las mismas calidades que los que son ‘pilos’. De esta manera, consideramos que se benefician unos, pero se excluyen a los otros, porque se cargan los recursos de financiación del mismo a la educación pública. Y ese tratamiento diferenciador no podemos admitirlo en el marco de nuestra democracia. Debemos garantizar que todos puedan acceder a educación superior con calidad porque en nuestro deber como Estado Social y Democrático. Frente, al sistema de salud se han ampliado coberturas hasta el 98%, no obstante, la calidad es desastrosa, pues tenemos un déficit anual de 3.5 billones de pesos en materia de salud. También, como dije anteriormente, debemos hacer una reforma a la ley 100, para poner en cintura a las EPS abusivas. Proponemos, también una reforma a la ley de víctimas, ya que esta expira su vigencia en el año 2021. Ello amerita un proyecto de ley que extienda la vigencia por cinco o diez años más, para que resuelva los conflictos que tiene en materia de restitución de tierras, armonizándolo con el acuerdo de paz.
¿De llegar al Senado, cuál sería el primer proyecto de ley que usted presentaría?
-La reforma a la ley de víctimas, porque es urgente y no podemos permitir que expire en el año 2021. No podemos dejar en el aire a 8 millones de víctimas que tienen todas las expectativas a ser reparados integralmente por lo que tuvieron que padecer por consecuencia del conflicto armado nacional. Esto lo haremos para armonizarlo con el proceso de paz, ya que no puede ambos aspectos están relacionados recíprocamente. No puede desconocer uno del otro.
¿En materia laboral, qué propone para adelantar la reforma al sistema pensional?
-Considero un craso error, pensar en un aumento en la edad de jubilación, porque, precisamente, debemos tratar de ampliar las coberturas en el derecho de acceso a la pensión. Actualmente, en Colombia hay 6 millones de personas en edad de jubilación, de esos, solo el 23% tiene asegurada una pensión. Esto quiere decir que, el 77% restante cumpliendo los requisitos se quedan sin su pensión. Ello, hay que trabajarlo para que la cobertura incremente y para que esas personas no queden a la deriva. Lo preocupante es que, quien padece dicha situación, queda abandonado a la suerte de los bonos de adulto mayor que entrega el Gobierno Nacional, los cuales son escuetos y no satisfacen las necesidades ni el mínimo vital de un colombiano.
Debemos adelantar una reforma pensional diferente a la propuesta por los fondos privados porque la misma está encaminada a afectar a los ciudadanos. Ellos solo pretenden mejorar sus bolsillos y no podemos permitirlo porque va en desmedro de la equidad y la justicia social.
¿Qué propone en materia agraria?
-El problema principal es el Latifundio improductivo. Ello no se ha resuelto desde la primera ley de tierras en 1936. Además, el latifundio improductivo en materia ganadera tiene efectos ambientales nefastos, por la deforestación ambiental. Por ejemplo, como Córdoba, donde se han secado infinidad de hectáreas para cumplir con los intereses de la actividad ganadera. El latifundio improductivo hay que revisarlo, para proteger el medio ambiente y para que los campesinos puedan acceder a la tierra a trabajarla y producirla. También deberíamos sustituir actividades cocaleras y mineras, por producción de alimentos. Ello, generaría mayor productividad. Hay que garantizar el acceso a tierra a campesinos que no la tienen.
¿Propone entonces sustituir completamente la minería?
-No, del todo no. Ya que debemos proteger la minería artesanal. Pero con mayor regulación sobre los estándares ambientales para evitar detrimentos al medio ambiente sano.
¿Qué propone usted para evitar el incremento de cultivos de cocaína?
-La política de fumigación fracasó, porque golpea al campesino. Ello afecta la salud pública y los ecosistemas del país. Debemos buscar otras alternativas, como la presencia permanente del Estado para prevenir la apertura de estos cultivos. Debe darse una estrategia integral que tenga mano dura frente a los narcotraficantes, pero benevolente frente a los campesinos que sufren la situación.
¿En materia de justicia qué propone?
-Una gran reforma a la justicia que cumpla las expectativas de todos los colombianos. Pero para ello, necesitamos un Congreso diferente. De lo contrario, tendremos que hacer uso de una Asamblea Constituyente.
¿Por qué los colombianos y colombianas deben votar por usted?
-Porque he trabajado por este país desde que tengo uso de razón. He demostrado diligencia y rectitud en mi actividad pública. Además, represento la regeneración al Congreso de la República. Es hora de acabar a los mismos con las mismas; aquellos que se han hecho elegir para satisfacer intereses particulares, olvidando las necesidades del conglomerado nacional. Trabajaremos en el Congreso por todos los colombianos del común, aquellos que se encuentran abandonados a su suerte por la ausencia del Estado.
Por: Juan David Escobar, editor de política.