“Abandono estatal”, son las palabras que se escuchan cada vez que se le pregunta a un habitante de La Guajira sobre la gestión del gobierno central en este departamento.
Pero ¿quién tiene la culpa de este “abandono”?.
Para nadie es un secreto que La Guajira es hoy en día uno de los departamentos más corruptos que tiene Colombia, pero no hay que culpar al gobierno central de estas acusaciones. También tenemos que evaluar lo que la población ha hecho para que así se vea ante los ojos de Colombia, pues no es un secreto que en este departamento los cargos públicos han sido propiedades de las mismas familias políticas ya hace varios años, y la población aún sigue eligiendo a estos personajes, eligieron a sus abuelos, a sus hijos y a sus nietos; favoreciendo o en otras palabras (aunque suene duro) regalándole la Guajira a los mismos de siempre.
Lo anteriormente dicho es lo que ha causado que el flagelo de la corrupción haya crecido y sea muy evidente en el departamento de la Guajira (uno de los mas ricos en Colombia). causando que el gobierno central se enfoque en señalar la falta de gobernabilidad que hay allí.
Entonces, ¿Quién tiene la culpa del olvido de la Guajira?. Como nacido, criado y educado en la Guajira, puedo decir que todos tenemos la culpa; la tiene el estado por no invertir de manera responsable en el departamento, la tienen las familias políticas que nos han gobernado por pensar solo en ellos y no en la población, y la mayor culpa la tiene la población por no hacer nada, por conformarse con las migajas que le dan, la tienen esos habitantes que se hacen llamar “apolíticos” y deciden no participar en los procesos democráticos sin saber -o aún sabiendo- que esto beneficia al corrupto. También tienen la culpa esos jóvenes que se hacen llamar el cambio y siguen las mismas tendencias ególatras que han marcado el pasado de la Guajira.
¿Y cual es la solución?, siempre hemos sabido la solución, solo que tenemos miedo.
Es el empoderamiento, empoderamiento en todos los campos administrativos, políticos, culturales, económicos y sociales que influyen en nuestro departamento, como lo han hecho jóvenes que han sido resaltados a nivel nacional e internacional. ¡Hay que salir de esa zona de confort y arriesgarse a cambiar realmente esta tierra!
Y somos los jóvenes los que podemos hacerlo, somos los jóvenes que tenemos que liderar el cambio, los jóvenes tenemos que hablar el mismo idioma; así la Guajira será imparable.
Y con ello demostrarle a todos, que la Guajira puede ser un departamento de ejemplo para Colombia, y que le quede claro al próximo Presidente de la República, que en la Guajira no solo es corrupción y mochilas wayuu; que aquí existen jóvenes que han sobresalido en diferentes escenarios a nivel nacional e internacional, mostrando lo mejor de la Guajira.
Termino entonces con la siguiente pregunta ¿vamos a permitir seguir en el olvido?