Herencia emocional y salud mental: El peligro de culpar al pasado, a propósito del discurso pop de las constelaciones familiares

“Los libros como Este dolor no es mío de Mark Wolynn invitan a reflexionar sobre el impacto del pasado en el presente, pero no debemos perder de vista que la solución a nuestros problemas emocionales requiere un abordaje profesional,  científico y profundo.  Textos como los escritos por Wolynn y compañía, aunque pueden ser herramientas útiles en ciertos contextos, no deben ser considerados como la única solución. La salud mental es un derecho fundamental que debe ser tratado con seriedad y responsabilidad”.


Hace aproximadamente un año, alguien me recomendó leer Este dolor no es mío de Mark Wolynn, como una novedad editorial en salud mental, un libro que aborda el impacto de los traumas familiares heredados en la vida presente. Aunque en su momento lo adquirí, solo hasta ahora me he decidido a leerlo. Lo que me ha desconcertado, más allá de su contenido, es la relación casi obsesiva que muchas personas tienen con los textos de autoayuda. Esto me ha llevado a reflexionar sobre el papel que juega este tipo de literatura en la vida de sus lectores y los riesgos que puede implicar su uso indiscriminado. En esta columna, me propongo explorar varios aspectos del fenómeno de la autoayuda, comenzando con la obra de Wolynn y el contexto de las constelaciones familiares.

La obra de  Wolynn ha resonado profundamente en el ámbito de la salud mental, abordando la compleja relación entre los traumas familiares heredados y nuestras propias vivencias emocionales. Al sumergirme en sus páginas, me he encontrado no solo con un contenido revelador, sino también con una inquietante tendencia: la obsesión que muchas personas parecen tener con los textos de autoayuda. Este fenómeno me ha llevado a reflexionar sobre el papel que juega esta literatura en la vida de sus lectores y los riesgos asociados con su uso indiscriminado. Debo reconocer que estas líneas las escribo luego de algunos comentaros suscitados en una de mis clases en donde discutíamos el tema de las emociones políticas en la sociología jurídica y el tema salió a la luz, y aunque en su momento creí que  se escribirían mucho mas fácil el tema resulto con muchas mas aristas de las que me imaginaba al comienzo.

el texto  en comento, gira en torno a la idea de que muchas de nuestras dificultades emocionales —como la depresión, la ansiedad y los dolores crónicos— podrían tener su origen en traumas no resueltos de generaciones anteriores. Wolynn, pionero en el estudio de los traumas familiares heredados y fundador del Family Constellation Institute, sugiere que estos traumas pueden transmitirse de padres a hijos, afectando nuestra salud mental y física. A través de las constelaciones familiares, una práctica terapéutica basada en la idea de que los miembros de una familia están conectados por lealtades invisibles y patrones emocionales, Wolynn plantea que es posible identificar y resolver esos traumas heredados para liberarse del sufrimiento.

La serie de Netflix Mi otra yo popularizó este concepto al incluir el libro de Wolynn como un elemento central en la trama, lo que pone de relieve el creciente interés en esta terapia alternativa y su relación con los temas de salud mental.

El tema de los traumas familiares y la necesidad de romper con patrones destructivos, no es exclusivo del autor en mención, ya que como es recurrente en el genero de la autoayuda, la temática se ha regado como pólvora y este caso no es diferente por esto vemos títulos así:  Cómo sanar tu historia familiar de Rebecca Linder Hintze. Este libro sigue una línea similar al de Wolynn, al enfatizar la importancia de identificar y deshacerse de esos patrones emocionales que se transmiten de generación en generación. Linder Hintze ofrece herramientas para romper el ciclo y evitar que las experiencias negativas del pasado continúen afectando a las generaciones futuras.

Ambas obras, a pesar de sus aportes a la comprensión de la herencia emocional, pertenecen al vasto y polémico campo de la autoayuda, donde es importante discernir entre las intervenciones basadas en evidencia científica y las que, como veremos, podrían clasificarse dentro de la pseudociencia.

Basta solo dar una ojeada por las librerías físicas o virtuales para darnos cuenta que el tema se encuentra en el tope de su popularidad con obras tales como: La herencia emocional de Ramón Riera, El cuerpo lleva la cuenta de Bessel van der Kolk, Los secretos que heredamos de Anne Ancelin Schützenberger o La biología de la creencia de Bruce Lipton, entre otros tanticimos títulos que el género de autoayuda populariza inmisericordemente.

La autoayuda y la pseudociencia

Sin embargo, es crucial discernir entre las intervenciones basadas en evidencia científica y aquellas que podrían considerarse pseudociencia. La autoayuda ha crecido exponencialmente en las últimas décadas, pero no todas las soluciones propuestas están respaldadas por investigaciones rigurosas. La pseudociencia se define como un conjunto de creencias o prácticas que se presentan como científicas, pero carecen del rigor del método científico. Esto puede llevar a los lectores a desarrollar falsas expectativas sobre su capacidad para resolver problemas complejos simplemente leyendo un libro.

Aunque la autoayuda puede ser útil para ciertas personas, también presenta peligros inherentes: tales como No está basada en evidencia científica. Muchas veces las soluciones que proponen no han sido validadas por investigaciones rigurosas, lo que puede ser problemático cuando se enfrentan problemas complejos como los trastornos de ansiedad o depresión. En otras ocasiones Agrava el sufrimiento. La búsqueda de soluciones rápidas e inmediatas puede empeorar la situación emocional del lector al no encontrar resultados, aumentando la frustración y el sentimiento de fracaso. Y también en otros casos  Responsabiliza a la víctima. Libros que promueven el pensamiento positivo absoluto pueden llevar a la persona a sentirse culpable por sus problemas, como si no estuviera haciendo lo suficiente para resolverlos, ignorando factores estructurales o genéticos que pueden estar fuera de su control.

Culpar a la familia: un enfoque dañino

Finalmente, existe un problema grave en muchos de estos textos: la tendencia a culpar a los padres y a la familia por los problemas emocionales. Aunque es cierto que la crianza y los traumas familiares pueden tener un impacto significativo, asumir que todo mal proviene de la herencia familiar puede ser simplista y, en última instancia, perjudicial. La salud mental es un tema complejo que involucra factores genéticos, sociales y psicológicos, y no puede ser reducido a una simple cuestión de karma o culpa.

¿Y cuando se necesita apoyo profesional real?

Uno de los mayores peligros de la autoayuda es que puede disuadir a las personas de buscar ayuda profesional. Los trastornos mentales como la depresión y la ansiedad requieren, en muchos casos, tratamiento especializado. Sin embargo, los libros de autoayuda pueden dar la impresión de que solo es necesario seguir sus consejos para superar cualquier problema. Esto no solo es irreal, sino que puede llevar a que los trastornos no sean diagnosticados ni tratados a tiempo, lo que agrava la situación.

Esto no significa que los libros de autoayuda no puedan tener un lugar en el bienestar emocional. Para algunas personas, pueden ser una puerta de entrada al autoconocimiento y un complemento a la terapia profesional. Lo importante es mantener el equilibrio y no asumir que leer un libro sustituye a la consulta con un profesional de la salud mental.

En su columna Sobre los libros de autoayuda en la vida contemporánea, Simón Ibarra Zuluaga reflexiona sobre la proliferación de estos textos y el rol que juegan en la vida moderna, apoyándose en las ideas del escritor G.K. Chesterton. A través de una mirada crítica, Ibarra analiza cómo, a pesar de las críticas que reciben, los libros de autoayuda efectivamente ofrecen alivio temporal, aunque no soluciones definitivas. El autor plantea que el aumento de su consumo refleja la necesidad de ayuda de la sociedad moderna, una necesidad que, sin embargo, sigue sin ser completamente satisfecha.

Ibarra también destaca el peligro del esnobismo intelectual, señalando que la desestimación de la autoayuda como un género «menor» es un error, ya que estos libros cumplen su propósito: consolar. Sin embargo, concluye que esta forma de literatura no puede reemplazar soluciones profundas, dejando una reflexión abierta sobre la búsqueda de sentido en la vida contemporánea y la eterna tensión entre lo espiritual y lo secular.

En Colombia no debemos olvidar que nuestro sistema de salud está lleno de obstáculos para la atención y los temas de salud mental son los grandes perjudicados de esta crisis Nubia Bautista, subdirectora de Enfermedades No Transmisibles del ministerio de salud para 2021, explicó que la salud mental es un estado dinámico que se manifiesta en la vida diaria a través del comportamiento y las interacciones, lo que permite a las personas, tanto individual como colectivamente, utilizar sus recursos emocionales, cognitivos y mentales para enfrentar la vida, trabajar, formar relaciones significativas y contribuir a la comunidad. En la región de las Américas, los trastornos mentales, neurológicos, el consumo de sustancias y el suicidio representan el 34 % de los años vividos con discapacidad, siendo la depresión la mayor causa.

Según los reportes del Sistema Integrado de Información de la Protección Social (SISPRO), el Observatorio Nacional de Convivencia y Salud Mental, y el Sistema de Vigilancia en Salud Pública (SIVIGILA), en 2021 se notificaron 29.792 casos de intento suicida, que representan una tasa de incidencia de intento suicida del 58.4 por cada 100.000 habitantes.

Mientras que, en 2020 se reportó una tasa ajustada de mortalidad por trastornos mentales y del comportamiento del 2.19, por lesiones autoinfligidas intencionalmente del 5.29, y por epilepsia del 1.74. También, una tasa de años de vida potencialmente perdidos por lesiones autoinfligidas intencionalmente del 247.7, y por trastornos mentales y del comportamiento del 35.6.

En Colombia, la depresión es la segunda causa de carga de enfermedad. El 44,7 % de niñas y niños tienen indicios de algún problema mental y el 2,3 % tiene trastorno por déficit de atención e hiperactividad.

En la adolescencia los trastornos más frecuentes son la ansiedad, fobia social y depresión; la ideación suicida se presenta en el 6,6 % de esta población (7,4 % en mujeres y 5,7 % en hombres). En la adultez, el 6,7 % ha experimentado trastornos afectivos.

 

La posición de la Corte Constitucional de Colombia sobre la salud mental

En Colombia, la Corte Constitucional ha establecido que la salud mental es un derecho fundamental, y en varias sentencias ha exigido que el acceso a tratamientos psicológicos y psiquiátricos se garantice sin barreras. En la sentencia T-178 de 2024, por ejemplo, la Corte ordenó a las EPS asegurar la continuidad de los tratamientos de salud mental para adolescentes. Esta jurisprudencia subraya que la salud mental debe ser abordada con seriedad, alejándose de la noción de que los problemas emocionales pueden resolverse de manera sencilla o a través de libros de autoayuda.

Los libros como Este dolor no es mío de Mark Wolynn invitan a reflexionar sobre el impacto del pasado en el presente, pero no debemos perder de vista que la solución a nuestros problemas emocionales requiere un abordaje profesional,  científico y profundo.  Textos como los escritos por Wolynn y compañía, aunque pueden ser herramientas útiles en ciertos contextos, no deben ser considerados como la única solución. La salud mental es un derecho fundamental que debe ser tratado con seriedad y responsabilidad.


Bibliografía

Wolynn, M. (2016). Este dolor no es mío. Editorial Urano.

Hintze, R. L. (2017). Cómo sanar tu historia familiar. Editorial Urano.

Declaración de la AMM sobre Pseudociencias y Pseudoterapias en el campo de la salud

Ibarra Zuluaga, S. (2020, julio 29). Sobre los libros de autoayuda en la vida contemporánea. Alponiente. https://alponiente.com/sobre-los-libros-de-autoayuda-en-la-vida-contemporanea/

sentencia T-178 de 2024

Bertomeu, E. (2019, enero 23). El peligro de los libros de autoayuda. Edupsicólogo. https://edupsicologo.com/peligro-libros-de-autoayuda/

Ministerio de Salud y Protección Social. (2021, octubre 12). Minsalud, comprometido con la salud mental de los colombianos. https://www.minsalud.gov.co/Paginas/Minsalud-comprometido-con-la-salud-mental-de-los-colombianos.aspx 

Carlos Andrés Gómez García

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.