Como si fuera un partido de fútbol muy desequilibrado, donde un equipo, el equipo del SI, tenia la mejor indumentaria, el mejor estadio, actuando de locales y trayendo jugadores extranjeros de la mejor talla, refuerzos del equipo ONU, Estados Unidos, Europa y en esa línea, la prensa nacional e internacional colocando titulares de victoria anticipada antes del encuentro, entre otras muchas cosas a su favor.
Por otra parte el equipo NO, con todo el animo de ganar, sabia que iba a ser un partido muy difícil, porque hasta el arbitro lo habían colocado a favor del equipo SI. Aunque los del SI, no tuvieron algo en cuenta, el equipo del NO apelo a la hinchada, a la ciudadanía y a la Fe, y resultó ganando el partido más difícil y desigual de la democracia en los últimos años en Colombia.
El 01 de Octubre en la noche el ambiente parecía muy confuso, por una parte en la calle, la mayoría de las personas en el taxi, en los peajes, en el cine y demás lugares comunes decían espontáneamente, voy a votar NO, sin embargo cuando se veía el televisor y la prensa toda decía SI, los canales y los videos reproducían el evento de la firma final del Acuerdo en Cartagena y se concluía “si hacen esto, es porque van a la fija” , sin embargo con ansias esperábamos que el 02 de Octubre empezara para dar la mejor batalla que un ciudadano al menos en los últimos 30 años de democracia colombiana iba a dar, decidir si apoyaba el Acuerdo de Paz con todos los cuestionamientos que tenia, o le daba la oportunidad a mejorar el Acuerdo y firmar algo donde todos los colombianos tuviéramos lugar, el resultado se dio, la segunda opción primó.
Hace un año en la mañana del dos de Octubre fuimos a las urnas, sin rivalidad, como amigos y familia, unos votábamos NO, otros votaban SI, así transcurrió el día, día sobre el cual nos dimos cuenta que así en un hogar donde el Papá votaba NO y su hija votaba SI, aunque de una cosa si estábamos seguros, la hinchada que veía el partido desde las barras, queríamos los mejor para Colombia.
Llego la tarde y el conteo empezó, sorpresivamente ganamos, ganamos si señor, el partido de fútbol más desigual de la historia, el partido sobre el cual los analistas daban posibilidad del 20% de ganar del NO, sobre 80% del SI, se revirtió y como pocos lo esperábamos ganó el NO, y en mi concepto ganó la democracia. El resultado de el NO fue de 6.430.170 votos, por su parte el SI obtuvo 6.371.911.
La consecuencia en principio fue buena, hubo espacio dentro de la posibilidad de modificar parte de los Acuerdos, los jóvenes nos acercamos entre el NO y el SI, hasta en la Habana hubo delegaciones, el Papa Francisco pidió una llamado de unión entre los sectores en el entendido que Colombia quería otro Acuerdo, todo iba bien, reuniones iban y venían, la victoria del NO había traído un resultado positivo para el país.
Hasta que llego el día 24 de Noviembre y con la firma definitiva del segundo Acuerdo de Paz y el cierre de toda posibilidad de negociación, la negación al primer constituyente de ratificar este Acuerdo y la creación de mecanismo por fuera de la Democracia para ratificar el Acuerdo de Noviembre, la conclusión que podemos sacar de todo lo anterior, es que el 02 de Octubre ganó la democracia y el 24 de Noviembre la burlaron.