“Otro tema que queda en la caldera es la conversación reciente entre Álvaro Uribe y Gustavo Petro. Lo que parece ser una dicotomía neófita que surge en el marco de los diálogos por la paz, es una simple conversación.”
Los últimos días del sexto mes del año 2022 han sido históricos para Colombia, y es que mucho se ha escrito sobre la victoria de Gustavo Petro y son numerosas las opiniones sobre el nuevo gobierno. Así que yo no pretendo recalcar la escalada de la izquierda en el poder. Quiero comentar sobre las posibilidades y quizás algunas predicciones para los próximos cuatro años.
Empezando por la composición del nuevo gabinete, varios medios y la misma campaña de Petro han puesto a diferentes actores políticos en la cartera. Alejandro Gaviria, exrector de la Universidad de los Andes se perfila para ser Ministro de Educación. Dos de los sectores más pensados como fichas claves para el nuevo gobierno, son el de Hacienda y Defensa. Para el primero, será designado José Antonio Ocampo, un economista de carrera y exdirector del Banco de la República. Para el segundo se piensa en William Salamanca, exmilitar y consultor de seguridad pública. Esto último podría ser un paño de agua tibia para los antipetristas, pues la experticia de aquellos personajes genera confianza para el progreso del país. Además, es el cumplimiento de una promesa sobre la recuperación de la Fuerza Pública y poder estatal. No obstante, en el nacimiento del cambio surgen peculiaridades, pues han llegado nuevas personas que se han montado al barco del gabinete, como el presidente de Alianza Verde, Antonio Navarro Wolf, quien fue estipulado para hacer el empalme de Minas y Energía.
Con respecto a la elaboración del Gran Acuerdo Nacional, la derecha afirma que Duque ha abierto la puerta hacia un futuro sin precedentes. Y algo que no esperaban eran las invitaciones del Pacto Histórico para un llamado hacia la conciliación. Así que, a la luz de encontrar parecidos, Petro ha estado invitando al diálogo a diferentes gremios y partidos políticos. Algunos esperados como Alianza Verde y Comunes, pero otros no tan acomedidos como el partido de la U y el Conservador. Aunque los asuntos anteriores parecieran independientes, estas fichas son claves para comprender el porvenir, pues, es fundamental saber quiénes serán parte de la oposición y los que apoyarán al gobierno entrante. A casi dos semanas de haber sido electo, las cartas de Petro están elaborando su propio destino y este, pinta muy bien. Hasta el momento no cuenta con opositores fuertes, sino con el público a su favor ¿será esta una función sin antagonistas? próximamente lo veremos.
Otro tema que queda en la caldera es la conversación reciente entre Álvaro Uribe y Gustavo Petro. Lo que parece ser una dicotomía neófita que surge en el marco de los diálogos por la paz, es una simple conversación. Como en una película infantil, los enemigos se enfrentan y logran un acuerdo, que, tras el apretón de manos, podemos decir que la política
es etérea y tiene un futuro incierto. Con ansias de conciliar un perdón social, las figuras más reconocidas en los últimos tiempos de la historia de Colombia están tirando para el mismo lado.
Lo que sabemos es que la entrada del nuevo gobierno es un alivio para las minorías, para los nadie, para aquellos que siempre fueron la carta invisible en el tarot. Y, algo por destapar es que ver el comportamiento de los actores políticos es interesante, pues afirma que en la política nada está dicho ni mucho menos hecho, al contrario, lo que es hoy, mañana es diferente. En este sentido, es sorprendente la forma en cómo el país se ha transformado en menos de seis meses. Por fin se escuchan los sollozos pasos de la unión nacional. Como seguidores de la campaña de Petro y Márquez, es nuestro deber realizar una veeduría como si se tratara de cualquier otro candidato en el poder. Mientras tanto, sólo queda esperar al 7 de agosto para la posesión de un cambio que ha sido tan reclamado por el pueblo colombiano. Si bien es difícil predecir lo que pasará en el futuro, nos queda la pregunta de ¿y ahora qué? ¿se han ganado todas las batallas? Y la respuesta es NO, aún hay mucho por concretar, sólo un ánimo esperanzador queda para Colombia. Una lectura de cartas no bastará para arreglar un país fracturado.
Referencias
Wohlgemuth, P. (2022, 29 junio). Así se perfila el gabinete de Gustavo Petro | El Colombiano. Recuperado de. ¡Error! Referencia de hipervínculo no válida.. https://www.elcolombiano.com/colombia/politica/gustavo-petro-y-su-posible- gabinete-CN17920763
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