El Hilo del Engaño

En San Andrés y Providencia no se gobierna… se reparte.
Aquí no hay democracia, hay sociedad por acciones.
Congresistas, gobernadores, alcaldes, diputados, concejales…
Todos han hecho parte del mismo libreto.
Y no se vigilan entre sí porque no están en bandos distintos, están en el mismo negocio.
El control político es una farsa.
Aquí nadie le exige al otro, porque todos se deben favores.
Porque aquí el representante no representa al pueblo. Representa al gobernador.
Y el gobernador no gobierna. Administra la rosca.

“Este es mi gobernador.”
“Este es mi representante.”
Así lo dicen con orgullo, como si la isla fuera un terreno que se reparten entre compadres.

Y mientras ellos se abrazan en oficinas, la juventud está perdiendo el alma.
Antes querían cambiar las cosas. Ahora solo quieren que los metan al combo.
Cambiamos el sueño por un contrato. La dignidad por una palanca.
Hoy el que no entra en la rosca, se siente fracasado.

Sí, hay parques bonitos, escuelas con pintura fresca.
Pero no hay respeto, no hay principios, no hay orgullo.
Y lo peor: ya nos acostumbramos.
Nos adaptamos al desorden. Al silencio. A la humillación como forma de vida.

Los alcaldes firman lo que les mandan.
Los concejales aplauden para que les den algo.
Los diputados no legislan: obedecen.
Y los congresistas se pasean por la isla como si fueran dueños de finca.

Y nadie dice nada.
Nadie levanta la voz.
Porque todos están amarrados por los mismos hilos.
Porque los puestos, los contratos, las promesas, todo viene con cadena.

Pero lo que más nos han robado no es la plata.
Es la fe.
Nos hicieron creer que no se puede cambiar.
Que es mejor que los hijos se queden afuera.
Que hay que guardar silencio.
Que el poder solo se gana si uno se vende.

Nos mataron el espíritu.
Nos volvimos un pueblo obediente…
Pero debajo de ese silencio hay fuego.
Y ese fuego está creciendo.

Porque las islas no nacieron para la obediencia ciega y sistemática del abuso.
Las islas son viento, mar, orgullo y verdad.
Y el día que recordemos quiénes somos… se les acaba el negocio.

!San Andrés Providencia y Santa Catalina despertaron!

Jayson Taylor Davis

Soy un abogado sanandresano, especialista y estudiante de la maestría en MBA en la Universidad Externado de Colombia.

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