Estimado doctor David Racero, congresista, representante a la Cámara, Honorable Parlamentario -dícese: HP-. Le comento que lo estuve buscando desesperadamente durante los dos días del paro nacional, pero no lo pude encontrar, y no creo que sea porque ande mal de visión, en lo absoluto, pues la movilización fue tan poco concurrida -en algún punto en la Plaza de Bolívar había más palomas que personas- que si usted, uno de los más distinguidos HPs del Pacto Histórico, se hubiera hecho presente, la algarabía sí hubiera sido muy grande.
Mi interés en buscarlo era por dos razones, la primera, para felicitarle por el aumento de su salario, pasar de 48 millones a cerca de 52 millones, el equivalente a 37 salarios mínimos legales mensuales vigentes solo puede ser motivo de celebración, porque ese aumento de 4 millones será de gran importancia para que siga ampliando la planta de personal de su Fruver, y lo pueda llevar a usted, un empresario en expansión -de eso no me cabe la menor duda-, a las principales ciudades del país.
Y precisamente a eso apunta mi segunda razón, le escribo, ya que no lo pude ver en el paro nacional y lo veo muy inactivo en su cuenta en X en medio de la discusión de la reforma laboral, lo que me extraña un poco porque siempre ha sido usted muy activo en redes, bueno, no me pierdo, mi razón se fundamenta en que me reciba usted una hoja de vida, puesto que, al ver su gran capacidad para emprender, y a su vez, ser un distinguido HP, trabajar con usted sería, ante todo, un privilegio.
Así que estoy dispuesto a asumir las condiciones laborales que considere; total, es usted un gran conocedor de la legislación laboral, sus luchas por los trabajadores, la mejora en su dignidad y condiciones laborales es inobjetable, al menos, su discurso no deja lugar a la más mínima fisura porque cuestiona, con ímpetu y valentía, a esos esclavistas que el presidente Petro no para de denunciar en plaza pública.
Confío tanto en su criterio y lucha por la dignidad de los trabajadores que, si usted considera que debo trabajar 13 horas al día, 78 horas la semana, con un solo día de descanso, siendo todero, ya sea, lavando baños, pelando fruta o fregando pisos, puede contar conmigo. Como un soldado más de la causa. Nada sería más honroso que entregar mi fuerza laboral a un HP de su estatura, porque usted doctor Racero, así no se lo crea, será presidente, primero será senador, ya verá, pero la Casa de Nariño, más temprano que tarde lo espera.
Por eso, también cuente conmigo para sus campañas políticas, volanteo al 100%, eso sí, sin descuidar las obligaciones de todero de las 13 horas diarias.
Eso era lo que le quería decir los días del paro nacional, pero no lo encontré, y lo peor es que ninguno de sus colegas del Pacto Histórico me dio razón, la demora era mencionar su nombre para que guardaran silencio, o me miraran con fastidio. Ni sé bien por qué, a lo mejor, envidian su talante y sagacidad, yo lo tengo claro, usted es el mejor de los HPs del Pacto. Duélale a quien le duela.
Termino esta solicitud y confió en que tenga muy presente mi hoja de vida. Solo le digo doctor Racero: soy un todero en alma y cuerpo. Conmigo en su Fruver los baños y los pisos siempre estarán relucientes. Porque el negocio de un HP de su estatura debe brillar en todo y en todo momento. Enhorabuena por el aumento de su salario y espero volver a verlo en plaza pública defendiendo los derechos de los trabajadores.
Así no me de el trabajito, cuenta conmigo.
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