Me senté a escribir esta mi columna semanal para el Portal Al Poniente en el restaurante Crama Sibiana (Bodega Sibiana) de Sibiu, una bellísima ciudad medieval en la región de Transilvania, en la república de Rumania, durante una correría en este país ubicado en el centro de Europa y en la cual habitan medio millón de gitanos.
Sibiu, fundada en el Siglo XII por colonos Sajones, logró que en el año 2004 que su Casco Antiguo fuera declarado, por la Unesco, patrimonio de la humanidad. Esta zona de la ciudad está dividida en dos partes conocidas como Ciudad Alta y Ciudad Baja. La primera fue siempre el sector de mayor categoría social y allí se asentaba el comercio, y la segunda ha sido el sector dominado por los asentamientos industriales.
La ciudad de Sibiu, un lugar digno de volver a visitar, fue elegida como capital europea de la cultura en el año 2007, honor que compartió con Luxemburgo. Como nos cuenta el sitio web de la ciudad (1) Sibiu tiene un sentimiento marcadamente germano y algunos la llaman “la ciudad alemana de Rumania” porque fue un importante asiento de ciudadanos alemanes.
Según lo describe el blog (2) “Un paseo por Rumania” Sibiu es una de las ciudades rumanas que tienen mejor conservada su herencia medieval y mantiene vivas sus murallas y fortificaciones. Para penetrar en sus entrañas la recomendación es caminar la ciudad sin rumbo, dándose la posibilidad de perderse en sus calles y plazas, transitando por la Piata Mica (pequeña) y la Piata Mare (grande), y recorriendo las calles de la Ciudad Alta, rodeada de murallas, y la Ciudad Baja, bordeando el río Cibín.
La Piata Mare es uno de esos lugares que quedan registrados en la memoria del visitante, cuyas edificaciones invitan a ser fotografiadas porque parecieran que fueran sacadas de acuarelas pintadas por artistas del renacimiento. El comercio en la Piata Mare conserva ese sabor antiguo marcado por tiendas, heladerías, cafés, chocolaterías y panaderías locales, que invitan a romper las dietas de quienes caminan por sus apacibles calles.
En ese recorrido libre por la ciudad, en compañía de mi familia, nos topamos con un famoso puente, denominado “El Puente de los Mentirosos”, (Podul Minciunilor).
Este viaducto fue construido (3, 4) en el año 1771 totalmente en madera y reconstruido en 1859 en hierro forjado, siendo el primer puente levantado en este material en el sureste de Europa. Con una longitud de 10,5 metros la estructura de hierro dulce está montada sobre una base de ladrillo y de sillar de piedra arenisca.
Quise tomar como ejemplo este referente turístico, ahora que estoy regresando a las aulas de turismo en el Colegio Mayor de Antioquia, donde me formé como Administrador Turístico. En mis clases y conferencias sobre Turismo siempre digo que un destino turístico es un conjunto de historias bien contadas, algo que entusiasma al viajero y lo hace enamorar de un destino.
El Puente de los Mentirosos es uno de esos espacios que se encuentran en la ciudad de Sibiu que conllevan no una sino varias historias y, sin importar si son fruto de la imaginación o pura realidad, cautivan al visitante que cuando se pone el sombrero de turista se emociona con los relatos, las historias y los mitos ciudadanos.
Según la tradición oral El Puente de los Mentirosos es un pontón que comienza a hacer ruido si quien camina por él dice una falsedad, e incluso existe la posibilidad de que colapse si la persona es harto mentirosa. Se dice que el puente puede escuchar y leer el pensamiento de la gente, y que se molesta cuanto se topa con un embustero, moviéndose y crujiendo en señal de fastidio.
La tradición oral de los habitantes de Sibiu cuenta varias historias que a través del tiempo se han consolidado como leyendas urbanas alrededor del Puente de los Mentirosos, que quiero detallar en esta crónica:
- Cuando los ciudadanos llegaban a sus casas, después de haber realizado diversas compras de mercancías, y encontraban que un comerciante los había engañado, lo llevaban al puente y al detectar la mentira lo incriminaban y a veces lo arrojaban por la baranda si la trampa era muy grande.
- La novia que había presumido falsamente de su virginidad antes del matrimonio, al quedar en evidencia su mentira en la noche de bodas, era llevada al puente por su desconsolado esposo quien le reclamaba su falta a la verdad.
- Cuando los cadetes de la Escuela Militar, vestidos con sus mejores galas, le prometían amor eterno a las damas de las clases aristocráticas de Sibiu, eran invitados por ellas a pisar el puente para validar sus juramentos. Entonces los cadetes desaparecían como por arte de magia, sabedores de que tenían que ir a inventar engaños a otros puertos.
La historia oral dice que el castigo del puente es poner al embustero con los pies en la tierra, incluso derrumbándose para que sus mentiras queden literalmente en el piso.
Este referente de City Marketing tiene varios puentes hermanos en otras ciudades del mundo:
El Puente de los Suspiros en Venecia, (Ponte dei Sospiri), (5), por el cual pasaban los condenados a muerte, antes de su momento final, y al rezar daban sus últimos suspiros expresando el deseo de estar con sus amadas durante toda la eternidad. La leyenda dice que si una pareja de enamorados pasa por debajo del puente (que queda sobre uno de los canales de Venecia) estarán juntos durante toda la eternidad.
El Puente Viejo de Mostar, (Стари Мост), en Herzegovina un símbolo de unión entre la cultura católica, del oeste, y la cultura musulmana, del este, separadas por el rio Neretva representa un canto a la convivencia entre estos dos pueblos. Fue construido por la ONU como un símbolo de la Paz al finalizar la guerra en los territorios de la antigua Yugueslavia.
El Puente de las Cadenas de Budapest, (Széchenyi lánchíd), que une dos ciudades Buda y Pest, separadas por el río Danubio, para darle forma a la gran Budapest. Este viaducto simboliza la democratización de la capital de Hungría porque por un lado unió a la ciudad señorial (Buda) con la ciudad plebeya (Pest) y obligó por primera vez a los nobles a pagar peaje para cruzar el Danubio tal y como lo hacían los pobres.
El Puente de la Luna o Puente de la Fecundidad en San Francisco. La tradición oral cuenta que la mujer que cruza el puente incrementa su capacidad de quedar en embarazo.
El Puente de las Artes en Paris, (Pont des Arts), (6), conocido como el Puente de los Candados del Amor, donde miles de parejas dieron testimonio de su amor sellando un candado entre sus rejas y tirando las llaves al fondo del río para que allí repose para siempre su promesa de amor. Recientemente los candados fueron retirados del Puente de las Artes, porque su peso de 45 toneladas ponía en riesgo su estructura, y ahora los turistas llevan sus candados, (7), a la plazoleta del Puente Nuevo (Pont Neuf).
El concepto de puente de los candados del amor se encuentra en muchas ciudades del mundo y su origen se ubica en la ciudad de Colonia, Alemania con su Puente Hohenzollern. Otras ciudades que tienen puentes del amor son: Roma, Salzburgo, Florencia, Moscú, Huangshan y Pécs.
Le di el toque final a esta columna en el Crama Sibiana, restaurante de comida típica de Rumania y puesto 18 de 136 en Trip Advisor, después de degustar una sopa de fríjoles blancos servida en un delicioso y redondo pan francés, y un estofado de pato cocinado según la tradición rumana. Prometo que haré esta sopa para compartir con algunos de mis amigos y la serviré en un esponjado pan francés cuando esté en Colombia. (Serán candidatos a ser invitados aquellos que le den un “me encanta” a esta columna en mi cuenta de Facebook).
Inspirado en estas historias hago por este medio una propuesta que bien pudiera ser acogida por los gobernantes locales o nacionales de nuestra querida y sufrida Colombia: construir el Puente de la Paz como un símbolo de reconciliación.
Para implementar este planteamiento podría convocarse un concurso donde participen grupos multidisciplinarios de profesionales con la participación de arquitectos, ingenieros, urbanistas, antropólogos, psicólogos, semiólogos, publicistas y mercadólogos, con la idea de que sea un referente para las nuevas generaciones y un espacio de City Marketing para los visitantes nacionales y extranjeros.
Dejo mi idea en borrador para que sea evaluada y construida colectivamente: un extremo del puente sería llamado “el camino del SI” y otro extremo sería denominado “el camino del NO”. La mitad del puente sería nombrada “el camino de TODOS”.
Esta fue una columna libre e independiente de Diego Germán Arango Muñoz, Ingeniero, psicólogo y Administrado Turístico, profesor de la Universidad Nacional de Colombia y consultor en Mercadeo Gerencial.
Bibliografía:
(1). http//www.inforumania.com/sibiu.html
(2). http://un-paseo-por-rumania.blogspot.com.co/2009/07/sibiu.html
(3). http://imbratisare.blogspot.com.co/2009/04/sibiu-y-el-puente-de-los-mentirosos.html
(4). https://www.kaercher.com/ar/inside-kaercher/patrocinio/patrocinio-cultural/luegenbruecke.html
(5). http://www.boschce.es/venecia-puentes-y-leyendas/
(6). http://www.lanacion.com.ar/1797787-asi-retiraron-los-candados-del-amor-del-celebre-puente-de-las-artes-en-paris
(7). http://www.abc.es/sociedad/abci-vuelven-candados-amor-puentes-paris-201603011106_noticia.html