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La 4ta Asamblea Campesina del Norte del Valle de Aburrá llevada a cabo el pasado 25 de octubre de 2025 en el corregimiento El Hatillo, Barbosa, convocó organizaciones sociales, campesinas, juntas de acción comunal, organizaciones de mujeres, mesas ambientales y acueductos comunitarios. En total 180 personas de 42 veredas de Barbosa que tuvieron el acompañamiento de algunas organizaciones sociales de Bello, Copacabana y Girardota. Este encuentro se realizó con el fin de generar debate, deliberación y con el propósito de exigir el cumplimiento de los derechos como campesinos y campesinas, fortalecer la organización comunitaria y proponer alternativas para la defensa y permanencia en el territorio rural campesino con justicia social, equidad de género y especial protección de las economías campesinas y los bienes comunes. Se concretó una agenda para la acción de la Asamblea Campesina, con especial atención en la exigencia de un Distrito Rural Campesino para Barbosa.
Barbosa: potencial productivo, ambiental y social
Barbosa es un municipio de Colombia que se ubica en la cordillera central, en una estribación de los Andes en el extremo norte del Valle de Aburrá, en el departamento de Antioquia. Limita al norte con el municipio de Donmatías; al sur, con San Vicente de Ferrer y Concepción; al oriente, con Santo Domingo; y al occidente, con Girardota. Su principal fuente hídrica es el río Aburrá que lo atraviesa de sur a norte.
Según el Acuerdo Municipal No. 008 (2024), citando datos del DANE (2024), en 2023 el municipio contaba con una población de 56.103 habitantes, de los cuales el 47,78 % se encontraba en la zona urbana y el 52,22 % en la zona rural. Esto convierte a Barbosa en el único municipio del norte del Valle de Aburrá donde la mayoría de la población reside en el área rural.
De acuerdo con los usos del suelo definidos en el Bio2030 de la Alcaldía de Medellín (2011) y el sistema de información geográfica de la Corporación Penca de Sábila, Barbosa es el municipio con mayor producción agropecuaria del Valle de Aburrá, destinando cerca del 50 % de su área total (aproximadamente 10.267,50 hectáreas de las 20.475,40 que lo conforman) a esta actividad. En la ruralidad, de los 8.847 predios existentes, 6.094 corresponden a predios campesinos que aportan una diversidad productiva.
En cuanto a la producción campesina, Barbosa continúa siendo una despensa agrícola del Norte del Valle de Aburrá, con una vocación diversa. Las veredas situadas en las zonas altas del lado sur y occidental de Barbosa presentan mayor productividad y diversificación de cultivos: variedades de papa, frijol, cebolla, maíz, pimentón, tomate, arveja y frutas cítricas, dulces, tropicales y ácidas, entre otras. En todas las veredas se encuentran cultivos de plátano y café, mientras que la caña de azúcar predomina en términos generales.
Para las personas participantes de esta reciente Asamblea Campesina fue común en mención de las potencialidades, el hecho de que aún hay producción campesina, en mayor medida en las veredas más alejadas del casco urbano del municipio y del corregimiento el Hatillo.
Barbosa posee aproximadamente 9.670,35 hectáreas con un potencial evidente para la conservación ambiental (Corporación Penca de Sábila, 2019). La protección del agua ha ocupado uno de los intereses principales debido a la abundancia de fuentes hídricas en el municipio, las cuales garantizan el abastecimiento para la población, sostienen las actividades agrícolas y pecuarias, fortalecen la identidad cultural y aseguran la preservación de la biodiversidad y los ecosistemas.
Al respecto, se destacan especialmente las veredas El Tigre, Mocorongo, Pantanillo, Chapa Alta y Monteloro, lugares donde hay presencia de bosques, humedales y afloramientos reconocidos por su importancia ecológica. Barbosa cuenta con la Reserva Ecológica, Forestal y Ambiental La Quintero de 803 Ha, aprobada mediante el Acuerdo 024 de 2006 del Concejo Municipal, y con el predio de restauración ecológica “Monteloro” en la vereda Cestillal, adquirido por el municipio.
En la Asamblea la gente reafirmó que Barbosa es un municipio con zonas importantes de conservación de bosque y agua. Fue común para todos y todas mencionar la abundancia de agua al mismo tiempo que la necesidad de trabajar en su gestión para que todos y todas puedan tener acceso, “tenemos agua de sobra en el municipio y le pedimos a la administración que nos ayude para tener agua potable”.
En el municipio persisten procesos colectivos con incidencia política, social y productiva relevante, como la Mesa Ambiental de Barbosa, las asociaciones de acueductos comunitarios, los grupos de mujeres y de adultos mayores, las iniciativas de transición y prácticas agroecológicas, los comités de microcuencas, la Junta Administradora Local (JAL) y las Juntas de Acción Comunal (JAC), presentes en cada vereda y con sus respectivos comités. De hecho, se están reactivando los consejos de participación de las Aldeas (Agencias Locales de Desarrollo Autónomo, iniciativa construida en 2009 por las comunidades en articulación con la Fundación Grupo Social, con el propósito de consolidarse como una unidad básica de planeación del territorio).

Permanencia y economía campesina en riesgo
Pese a todo lo anterior, Barbosa presenta el índice de pobreza multidimensional más alto del Valle de Aburrá. Según el Plan de Desarrollo de Barbosa 2023–2027, con base en la Encuesta de Calidad de Vida (ECV) 2019, este índice alcanza un 8,52 en promedio, siendo mucho más elevado en la zona rural (12,75) que en la urbana (3,41).
La acción institucional ha sido insuficiente para atender de manera integral, y desde una perspectiva de derechos fundamentales, las demandas de la vida y la economía campesina en las veredas. Esta omisión implica un alto riesgo no solo para la permanencia de las comunidades, sino también para la producción de alimentos y la sostenibilidad ambiental del municipio y de la región.
Durante el acompañamiento que ha adelantado la Corporación Penca de Sábila en el presente año, las comunidades de más de 40 veredas han relatado los impactos que han sufrido sus territorios en los últimos cinco años y que tienen en riesgo inminente la permanencia campesina, dentro de los cuales se destacan los cambios en la densidad y en la ocupación del suelo; la presión sobre los bienes comunes naturales; los cambios en las actividades productivas¸ la pérdida de la economía campesina y los cambios sociales y organizativos. Estos impactos fueron reiterados en la Asamblea Campesina del Norte del Valle de Aburrá:
“Uno ya no conoce la gente de la vereda, ¿quién es fulano? Uno no sabe”. Con respecto a los cambios en la densidad y en la ocupación del suelo las comunidades ratifican fenómenos que se hacen evidentes al recorrer las veredas: la fragmentación del suelo rural mediante procesos de loteo y parcelación y la introducción de fincas de recreo y de procesos de suburbanización asociados al incremento de la población. Generalmente estos cambios están relacionados con las presiones económicas que provocan la venta de predios, la valorización por proyectos de infraestructura vial, el aumento en el costo de vida y la ausencia de una regulación efectiva.
“Nuestro nacimiento [de agua] ha estado afectado por una construcción que están haciendo en la parte alta”; “El 90% de Barbosa está solicitado por titulación minera, ¿a quién pertenecen los títulos? ¿Corantioquia cómo está entregando las licencias?”. La presión sobre los bienes comunes naturales se encuentra relacionada con la falta de regulación de las autoridades hacia las actividades mineras y las construcciones en las veredas que, a su vez, ocasionan la pérdida de la biodiversidad y ponen en riesgo las fuentes hídricas y la disponibilidad de agua en el municipio. A esto se suman las afectaciones por el funcionamiento del Parque ambiental La Pradera.
“La mano de obra se está acabando, la persona de 65 – 70 años, si es capaz de sembrar la cañita, no es capaz de sacarla”. Por su parte los cambios en las actividades productivas con el aumento de cultivos intensivos agroindustriales con aplicación de altas dosis de insumos de síntesis química que afectan la salud y el medio ambiente y la pérdida de la economía campesina están ligados a la falta de relevo generacional campesino y a la desvinculación del trabajo agropecuario. La consecuente pérdida acelerada de la producción agropecuaria del municipio también se debe en gran parte a la falta de garantías para la producción y comercialización de los productos campesinos.
“Llega mucha gente los fines de semana, se dan cuenta de lo que tenemos los campesinos y nos pueden afectar con los robos, los vicios”. Frente a los cambios sociales y organizativos es reiterativa la queja de las veredas ante la falta de garantías de seguridad por parte de la institucionalidad, lo que ha dado lugar al aumento de la inseguridad y a la presencia de actores armados que ejercen control sobre las veredas. De igual manera, la gente ha destacado que un cambio social relevante es la pérdida de la educación rural; como fenómeno evidente en algunas veredas se encuentra el cierre o desplazamiento de las escuelas rurales. Además, se mencionó un riesgo en tanto la participación social y política, se dijo: “Yo creo que una amenaza es que nadie quiere ser líder”; “la participación ciudadana es costosa…”.
A todo esto, se suma una planeación municipal que orienta a Barbosa hacia una creciente vocación industrial, subordinando la empleabilidad a las empresas privadas y reduciendo las posibilidades de cultivar, transformar y consumir, así como de comercializar productos propios.
Es un hecho que el ordenamiento territorial no responde a estas demandas. Lo rural y campesino dentro del Plan Básico de Ordenamiento Territorial se reduce a la definición de unos usos del suelo, mientras que los instrumentos de planificación, gestión y financiación son limitados para la ruralidad. A esto se suma que los programas de ejecución del PBOT no se implementan de manera adecuada ni responden con eficacia a los conflictos por el uso del suelo y a las problemáticas socioambientales que atraviesan las veredas.
Así, la configuración territorial responde a intereses y dinámicas que ponen en riesgo la permanencia del campesinado. La inseguridad, la presión y expansión de actividades extractivas, los procesos de densificación en áreas rurales, el aumento de la densidad poblacional, la pérdida de la educación rural, el debilitamiento de la economía campesina y los cambios de la vocación productiva, la degradación y pérdida de los ecosistemas, son expresiones de un mismo modelo de desarrollo que configuran un escenario de descampesinización progresiva y amenazan a las comunidades que han cuidado la vida en el territorio.
Una alternativa posible: El distrito Rural Campesino en Barbosa
La alternativa de un Distrito Rural Campesino -DRC- para Barbosa surge como una respuesta colectiva frente al avance del modelo urbano-industrial. Para la presentación de dicha propuesta la Corporación Ecologista y Feminista Penca de Sábila ha promovido un proceso participativo que convocó a las veredas del municipio de Barbosa, con el fin de que la iniciativa responda a las particularidades de cada territorio. Este proceso se desarrolló a través de estrategias como los encuentros con el Comité de Impulso de la Asamblea Campesina del Norte del Valle de Aburrá, recorridos territoriales por las veredas de Barbosa y encuentros zonales con la comunidad. “Una potencialidad es este proceso de juntanza que llevamos”.
La iniciativa toma como referencia la experiencia del Distrito Rural Campesino de Medellín, cuyos aprendizajes fortalecen la figura en aras de avanzar hacia una Biorregión campesina en el Valle de Aburrá, capaz de proteger y gestionar a los territorios rurales campesinos y los ecosistemas en torno a la justicia agraria, la soberanía alimentaria y la defensa de los bienes comunes.
La propuesta del DRC hace un llamado a reconocer al campesinado como sujeto político, con derechos y con propuestas para garantizar la vida digna en el campo que potencie la permanencia campesina como base de la vida y de la sustentabilidad en Barbosa y en el Área Metropolitana.
La implementación de un Distrito Rural Campesino puede convertirse en una oportunidad concreta para reducir las brechas estructurales entre el campo y las áreas urbanas, al redireccionar las inversiones hacia el territorio rural. En esta vía, el DRC se proyecta como una figura de protección y defensa del territorio, capaz de ampliar las posibilidades de conservación ambiental y, al mismo tiempo, garantizar los derechos de las comunidades campesinas.
Supone también la exigencia de un Estado comprometido con el fortalecimiento de la economía y la vida campesina, reconociendo los modos particulares de habitar y las formas singulares que las comunidades construyen en su relación con la tierra y el territorio. Todo ello implica apostar por su capacidad de participación, siempre y cuando se generen las condiciones reales para que esta sea efectiva y vinculante.
La posibilidad de implementar un Distrito Rural Campesino a través de Unidades de Planificación Rural constituye una oportunidad innovadora para ordenar el territorio rural y orientar el desarrollo rural en Barbosa. Las UPR, como instrumentos de planificación de escala intermedia, permitirán definir y precisar las condiciones de ordenamiento en áreas específicas del suelo rural, facilitando un abordaje integral de distintos aspectos del desarrollo rural, tales como la estructura ecológica principal, los sistemas productivos agrícolas y pecuarios, la vivienda y el hábitat, los equipamientos y la infraestructura. Todo esto se realizará bajo objetivos formulados de manera participativa con la comunidad rural y campesina del municipio, y concertados con garantías ante las autoridades competentes.
El sábado 25 de octubre de 2025 la Asamblea Campesina del Norte del Valle de Aburrá hizo un llamado contundente por un Distrito Rural Campesino incorporado dentro del Plan Básico de Ordenamiento Territorial de Barbosa que responda a las demandas territoriales, rurales, campesinas, que actúe como garante de derechos en el campo acorde con sus realidades, con recursos suficientes y mayor compromiso institucional.















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