La obediencia de las masas

“Comprender estos mecanismos no es un ejercicio académico, sino una necesidad vital para fomentar la autonomía, el pensamiento crítico y la responsabilidad ética”


La obediencia de las masas constituye uno de los fenómenos más persistentes y, a menudo, inquietantes de la historia humana. No se trata simplemente de seguir órdenes, sino de una cesión de la autonomía individual en favor de una autoridad o un colectivo, un acto que las ciencias sociales abordan desde diversas ópticas para desentrañar sus profundos mecanismos.

Desde una perspectiva psicológica, la obediencia de las masas se explica por la alteración de la psique individual al ser absorbida por un grupo.

El trabajo fundacional de Gustave Le Bon en Psicología de las masas (y retomado por Freud) describe cómo, al formar parte de una masa, la personalidad consciente del individuo se esfuma. Desaparecen la voluntad y el discernimiento crítico, y se produce un fenómeno de contagio mental y sugestión. El individuo masificado se vuelve:

Extremadamente influenciable y crédulo: Pierde el sentido crítico y la noción de lo inverosímil.

Emocional y volátil: Sus sentimientos son simples y exagerados, tendiendo al extremo sin dudas ni incertidumbres (Le Bon).

Regresivo: Se comporta en un estado mentalmente regresivo, a menudo dominado por la irracionalidad y la emocionalidad.

Ciencia Política y Sociología: Legitimidad, Dominación y Poder Social

La Sociología y la Ciencia Política analizan la obediencia en el contexto de las estructuras de poder y dominación social.

El sociólogo Max Weber proporciona un marco fundamental para comprender por qué se obedece. La obediencia no es un acto ciego, sino que se sustenta en la legitimidad que la masa le otorga al poder. Weber identifica tres tipos de dominación que motivan la obediencia:

Dominación Legal-Racional: Basada en la creencia en la legalidad de las reglas y la autoridad de quienes ejercen el mando según esas reglas (burocracia, Estado de Derecho). Se obedece al ordenamiento impersonal, no a la persona

Dominación Tradicional: Basada en la creencia en la santidad de las tradiciones y la legitimidad de las personas que las encarnan (monarquías, costumbres ancestrales).

Dominación Carismática: Basada en la devoción a las cualidades extraordinarias (santidad, heroísmo) del líder individual (profetas, líderes militares). Esta forma es irracional y carece de reglas estables

Para la Ciencia Política, la obediencia es un elemento constitutivo del orden político. La obediencia requiere la participación en una obra común. No es mera pasividad, sino el reconocimiento de la necesidad de la obediencia para la subsistencia del sistema.

Influencia Social y Conformidad

Desde la Sociología, la obediencia de masas también está ligada a la influencia social y la conformidad. El individuo se somete a la voluntad del colectivo, no solo por convicción, sino por la presión de encajar (cohesión grupal) y por la necesidad de reducir la incertidumbre en un ambiente social complejo. El hecho de pertenecer al grupo diluye la responsabilidad individual, facilitando la toma de posturas o la ejecución de acciones que el individuo, de forma aislada, no se atrevería a realizar .

Psicoanálisis: El Lazo Libidinal y el Ideal del Yo

El Psicoanálisis, especialmente con Sigmund Freud en Psicología de las masas y análisis del yo, profundiza en las bases inconscientes de la cohesión masiva y la obediencia.

Freud argumentó que la clave de la masa es el establecimiento de un fuerte lazo libidinal entre sus miembros y con el líder. La obediencia surge de un mecanismo psíquico de identificación:

El Ideal del Yo Común: Una masa se cohesiona cuando una multitud de individuos ponen un mismo objeto (el líder) en el lugar de su Ideal del Yo. El líder encarna la perfección, el modelo de lo que el individuo desea ser.

Identificación Horizontal: Al compartir el mismo ideal (el líder), los miembros de la masa se identifican entre sí en su yo, forjando un lazo de unidad y fraternidad.

En esencia, el individuo renuncia a su propio Ideal del Yo en favor del líder, quien a su vez parece amarlos a todos por igual (Eros), generando una pulsión social que une a la masa. Esta sustitución provoca una regresión psíquica donde la conciencia desaparece y la masa manifiesta una violencia de sentimientos y una credulidad excesiva. Para el psicoanálisis, esta dinámica puede explicar la obediencia acrítica ante figuras de gran trascendencia histórica, como los fenómenos psicopolíticos del siglo XX (fascismo, nazismo, estalinismo)

La obediencia de las masas es un fenómeno de encrucijada, con raíces que se extienden desde la mente individual hasta las más complejas estructuras sociales. La psicología explica la disolución de la mente crítica; la sociología y la política analizan la necesidad de legitimidad y la dilución de la responsabilidad; y el psicoanálisis revela el poderoso lazo emocional e inconsciente (la identificación con el líder como Ideal del Yo) que cementa la cohesión y la sumisión. Comprender estos mecanismos no es un ejercicio académico, sino una necesidad vital para fomentar la autonomía, el pensamiento crítico y la responsabilidad ética frente a los llamados acríticos del poder.

Astrid Suárez Velásquez

Soy Administradora Pública egresada de la Institución universitaria Politécnico Grancolombiano, y soy educadora egresada de la normal nacional para señoritas de Copacabana Antioquia, presté mi servicio público durante 21 años de mi vida, actualmente soy independiente en el sector el comercio.

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