Que Zuluaga renuncie para que Santos pierda

La estratagema montada desde la campaña de Juan Manuel Santos funcionó a la perfección. De seguro, en la campaña de Zuluaga recibieron con agrado la participación de personas famosas en el mundo electoral, con información interesante, y pretendieron usar tal información en provecho propio. Sin embargo, faltaron a un mandamiento en escenarios electorales: sospechar de todo. En suma, de eso no daban tan bueno. Una firma que ha trabajado para todos los políticos, que tiene información sumamente importante que se clasifica como secreto de Estado, y que puede llegar a atentar contra la imagen del candidato presidente, decide irse con Zuluaga. Todo esto, en el marco de un proceso electoral en el que el candidato del Centro Democrático venía ganando terreno. Era la mata de la sospecha.

Pero la culpa de Zuluaga, lastimosamente, no se queda atrás. La campaña recibe con agrado este tipo de participaciones por lo que se puede apreciar en el audio de 20 minutos en los que, por lo que escucho, el señor Sepúlveda le comenta al candidato que la información que utiliza es, palabras más palabras menos, confidencial. Esto en materia jurídica se clarifica de forma simple: información que no tienen por qué tener los civiles.

Como soy politólogo y profesor de ética y política en EAFIT, no me puedo quedar quieto con este tipo de escenarios en los que observo un anzuelo perfectamente preparado, y un pez gordo que se lo traga sin sospechar nada de lo que realmente pasaba. En primer lugar, considero necesario hacer un llamado a los medios de comunicación para decir, sin muchos enredos, que la inclinación gobiernista es absolutamente repugnante. Los medios dejaron de ser medios en sentido comunicacional, y pasaron a serlo en sentido instrumental: al servicio de Juan Manuel Santos. Nada de lo que Santos dice o hace pasa a ocupar un punto importante en la agenda. La corrupción les dio por llamarla mermelada, pues parece que el tema de cupos indicativos al servicio de beneficios electorales les parece una vaina de lo más normal y dulce; las irregularidades en la formulación y adjudicación de proyectos de infraestructura parece que se justifican en «por lo menos se gastó la platica»; y las denuncias que hace Coronell (para no hablar de Uribe, ampliamente satanizado en este país) sobre Germán Chica y JJ Rendón, pasan de largo. Todo esto sin mencionar, por supuesto, la detestable campaña de Cambio Radical, sujeta desde ya a demandas ganadas a pulso.

En segundo lugar, hago una llamada a la campaña de Zuluaga. Miren, en efecto esto fue una trampa (o un montaje como dicen) en la que ustedes cayeron, pero cuidado: cayeron. Es muy triste que un buen candidato transitara por senderos que no le correspondían, pues este tránsito no solo le permitió caer en la trampa -caminar por donde no debe y caer en la trampa hace necesario asumir la culpa entera de la acción, sino perder la campaña por un asunto infinitamente innecesario. ¡No tenían por qué hacer eso¡ Algunos votantes suyos, no muchos por supuesto, vemos tambalear nuestra antiguamente sólida decisión. Ningún indeciso con tres dedos de frente tomará la decisión que desean.

Miren, estimados lectores: jamás quise a Santos de presidente, mucho menos lo quiero volver a ver tomando posesión. Hay más candidatos, en particular tres. Mi invitación, como profesor de ética y política, es que un candidato como Zuluaga debe renunciar, así como también debería hacerlo el terrible candidato presidente que no tiene ni un solo escrúpulo electoral. Si Zuluaga renuncia el viernes, durante el último debate dirigiendo su apoyo a otra candidata, no solo saneará su imagen demostrando que es un político de palabra, sino que además ofrecerá el escenario ideal en el que Santos no gana, y queda uno de los tres candidatos: Marta Lucía Ramírez, como presidenta de Colombia. Ojalá y pasara.

@tobonvillada

[author] [author_image timthumb=’on’]https://fbcdn-sphotos-d-a.akamaihd.net/hphotos-ak-prn1/t1/1488896_10202086754224487_208028205_n.jpg[/author_image] [author_info]Andrés Felipe Tobón Villada Politólogo de la Universidad EAFIT y actual candidato a la Maestría en Estudios Humanísticos de la misma Universidad. Ha publicado en revistas académicas locales como Cuadernos de Ciencias Políticas del pregrado en Ciencias Políticas de la Universidad EAFIT, y en revistas indexadas internacionales como Razón Española. Asimismo, participó en la creación del cuarto tomo del Diccionario crítico de Juristas Españoles, Portugueses y Latinoamericanos (Hispánicos, Brasileños, Quebequenses y restantes francófonos) de la Universidad de Málaga. Actualmente se desempeña como docente y consultor analista en la Universidad EAFIT. Leer sus columnas.[/author_info] [/author]

Notas Al Poniente

Al Poniente es un medio de comunicación independiente que tiene como fin la creación de espacios de opinión y de debate a través de los diferentes programas que se hacen para esto, como noticias de actualidad, cubrimientos en vivo, columnas de opinión, radio, investigaciones y demás actividades. En este espacio publicamos puntos de vista de los integrantes, información de aliados y patrocinadores, boletines e informaciones externas y notas de ciudad.

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.