Los juanmanueles, los guerrilleros, y nosotros los robledistas

Yo sé que Santos es un oligarca, yo sé que Santos es un delfín, yo sé que Santos quiere firmar la «paz en Colombia» no por altruismo, sino porque Santos es un carajo muy vanidoso, yo sé que la única razón de Santos para firmar «la paz en Colombia», la única razón de Santos: es su narcisismo; pero no hay problema

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Yo sé que Santos es un oligarca, yo sé que Santos es un delfín, yo sé que Santos quiere firmar la «paz en Colombia» no por altruismo, sino porque Santos es un carajo muy vanidoso, yo sé que la única razón de Santos para firmar «la paz en Colombia», la única razón de Santos: es su narcisismo; pero no hay problema, cada quién puede ser narcisista, más aún, si uno tiene dinero y nació en familia de presidentes, para uno no pasar a la historia como el peor presidente de Colombia, como lo fue Andrés Pastrana, por eso es que uno se esfuerza a ver si a uno le dan «el premio nobel de la paz», si le dieron ese premio a Obama, sabiendo que es el presidente del país más mafioso y guerrerista, uno pensaría: «¿por qué no me dan el premio nobel de la paz?, yo que siendo hijo de la oligarquía, yo que fui ministro de un mafioso, yo que comprendí que la única forma de pasar a la historia es firmando la paz, yo que soy un delfín, yo que nací presidente, mejor pasar a la historia como el «presidente de la paz», mejor hacer eso, que pasar a la historia como un presidente de derecha tan malo como Andrés Pastrana, mejor yo ser el único presidente del mundo en Colombia que me dieron el premio nobel de la paz, no por ser negro sino por firmar «la paz» con la guerrilla colombiana, por más chusma que sea; pero yo seré el presidente de la paz, por más duro que sea esto, así mi ex patrón, Álvaro Uribe Vélez, se enoje porque yo, Juan Manuel Santos, prefiero pasar a la historia como el presidente de la paz, a que me digan que cuando yo fui ministro de Álvaro Uribe Vélez, yo ordené asesinar a campesinos desempleados, que yo ordené que los vistieran de guerrilleros, para que los pudieran matar, mejor que eso, mejor que digan que «yo fui el presidente de la paz».

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Querida amiga, como te dije en una conversación anoche, en mi opinión, el senador Robledo, siempre actúa como un caudillo, aunque mi amigo, Jorge Gómez, me dice que ellos, los del MOIR: «no les gusta los caudillismos de ninguna índole». Pero, yo pienso, es mi opinión personal nada más: que es mejor: un caudillo de izquierda en la presidencia del país, que un demócrata de derecha, elegido por los amigos «compañeros» comunistas. Un abrazo.

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No porque uno sea de izquierda le va a perdonar «TODO» a las FARC. Es más, cuando uno ha podido constatar cosas como estas, para poner un ejemplo nada más: en el municipio antioqueño llamado Caicedo, un pueblo pequeño, bonito, cafetero… en este pueblo: la primera obra que llevó el Estado colombiano fue un búnker de la policía, (obra del infame Álvaro Uribe Vélez). Como Caicedo tuvo la fortuna de ser un pueblo menor, dado que toda la atención se la llevaron sus vecinos de Urrao y de Santa Fe de Antioquia. Dado que Caicedo es un pueblo chiquito, las FARC, allí no había hecho ninguna operación militar considerable, hasta el día que Álvaro Uribe Vélez le dio por construir allá un búnker de la policía. Pues bien, dado que el búnker quedó al lado de la Iglesia del pueblo, las FARC, para tumbar el búnker tuvieron que tumbar y destruir completamente la iglesia, entonces, la gente de Caicedo que no tenía que reprocharle nada a la guerrilla, hasta ese entonces, ese día le reprocharon a las FARC que les hayan destruido su templo sagrado.

Entonces uno se pregunta: ¿qué era mejor: o destruir un búnker de la policía para ganarle una batalla a Álvaro Uribe Vélez o dejar ese verraco búnker intacto para no tener que destruir la iglesia?… que sabemos: a la gente le gusta ir a rezar. Las FARC, en mi opinión, le deberían ofrecer excusas a los habitantes de Caicedo y construirles de nuevo su iglesia. Porque en mi opinión, porque sea uno de izquierda, no va a dejar uno de ser crítico con las FARC.

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«¡Ay!, ¡Qué mis amigos comunistas comprendieran que no es que Robledo se «autoproclame» candidato presidencial sólo porque es muy «narcisista», sino porque él es el único precandidato en Colombia que actualmente tiene los argumentos racionales y él es el único precandidato que tiene la autoridad moral para ser, en verdad, el único precandidato decente a la presidencia de este alocado país….¡Ay¡ ¡Si mis amigos comunistas comprendieran que a pesar de que ellos tienen la razón de querer apoyar a Humberto de la Calle «porque ese sería el único precandidato que respetaría los acuerdos en la Habana»… Pero es que queda muy loco que después de tantos años de lucha y de tantos sacrificios, los «compañeros» comunistas decidan que su candidato: sea ese señor de derecha, sólo porque «es el más racional»… ¡Ay!

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Ayer 27 de agosto de 2016: en el recinto del Concejo de Medellín: mi papá, Robledo y yo: felicidad infinita.

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El senador Robledo ayer me prometió, delante de un montón de gente, que él me va ayudar a financiar o que él me va ayudar a conseguir los recursos económicos, para que yo: historiador con anhelos de ser biógrafo: realice la investigación más completa, más profunda y más profesional sobre la vida de Rodrigo Saldarriaga, y, para que yo, escriba un libro donde se cuente la vida y obra del viejo con ojos de lobo siberiano.

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Puede ocurrir que la gente piense que yo estoy loco, pero no lo estoy tanto. Puede ocurrir que la gente piense que yo soy un adulador, pero no lo soy.

Frank David Bedoya Muñoz

Frank David Bedoya Muñoz (Medellín, 1978) es historiador de la Universidad Nacional de Colombia y fundador de la Escuela Zaratustra. Fue formador político en la Empresa Socialista de Riego Río Tiznado en la República Bolivariana de Venezuela. Ha publicado “1815: Bolívar le escribe a Suramérica”, “Relatos de un intelectual malogrado” y “En lo alto de un barranco hay un caminito”, libro que reúne cinco relatos, un ensayo y dos conferencias sobre la vida y obra del Libertador Simón Bolívar. Actualmente es asesor en el Congreso de Colombia.